El sabor de esta carne es el genuíno, nada que ver con la de los pollos del súper a los que estamos acostumbrados, por lo que al principio puede resultar fuerte o extraño. Esta carne además tiene mucho carácter, es más fibrosa y necesita de una cocción más prolongada, debido a que el crecimiento y engorde es mucho más lento que el de los pollos "industriales" y a que andan por el corral correteando libremente en busca de congéneres enfermos a los que matar a picotazos (entre otros inocentes pasatiempos de estos bichos del demonio)
Tradicionalmente, la mejor manera de disfrutar del pollo era cocinándolo con arroz porque había que hacer que cundiese y diera de comer a una familia labriega bastante numerosa. Se acompañaba de los productos de la huerta y era un plato para las grandes ocasiones.
Como veis en esta foto, el muslo posee una carne muy roja y con grasa amarilla, mientras que la pechuga es rosada. El contraste es grandísimo...¿diríais que son partes del mismo animal?
Y bueno, basta ya de charla que nos vamos a la receta:
Arroz caldoso con pollo de corral (donde comen 4 comen 8...)
-Pollo de corral en trozos medianos
-2 vasos de vino llenos de arroz
-8 vasos de vino llenos de agua
-azafrán
-1 tomate
-1 pimiento chorrón (pimiento rojo duce seco) o 1/2 rojo fresco
-1 pimiento verde pequeño
-ajos
-250g de judías verdes
-un puñado de setas secas
-1 hoja de laurel
-pimienta negra
-aceite de oliva
-sal
En una sartén poner aceite de oliva, salar el pollo y freírlo a fuego fuerte hasta que esté dorado. Reservar este aceite.
Poner el agua con el pimiento chorrón, y el laurel a hervir en la cacerola donde vaya a hacerse el arroz, añadir el pollo dorado y dejar cocer a fuego lento durante una hora y media.
En el aceite del pollo hacer el sofrito con el pimiento verde, las judías verdes, tres dientes de ajos enteros, el pimiento rojo si no se usó el chorrón, el azafrán y sal. Cuando estén pochados, añadir el tomate pelado y sofreír hasta que se evapore su agua.
20 minutos antes de que el pollo esté, añadirle el sofrito y las setas secas. Cuando el pollo haya hervido hora y media añadir el arroz junto con la pimienta y sal si fuera necesario.
Dejar cocer 20 minutos, apartar del fuego y dejar reposar 5 minutos.
El arroz debe quedar meloso y con caldo, para comer con cuchara. Algo así:
6 comentarios:
Madre mía quien pudiera meter la cuchara en esa perola. Un resultado de lujo.
Besos
POLLO??? Ha dicho pollo y lo que sigue!!
Ay Mar, como me recuerda este pollo de corral al "Gallo de Navidad" que prepara mi tía todas las Nochebuenas en su casa... caldosito también y con arroz.
Si es que no hay como una buena comida para evocar buenos momentos con la familia, verdad?
Besos.
Hola, Adi. Es que este plato era de fiesta, y qué mejor que la nochebuena, no?
la pena es que ahora la gente pondría cara rara de "este pollo sabe a pollo, puaj"
En fin...
que buena pinta tiene el arroz y lo que dices del sabor tienes toda la razon es que el pollo de corral es inigualable.
He comido muchos arroces en mi vida, pero nada parecido a un buen arroz con pollo de corral hecho a la antigua, osea, con leña. Madre mia!! Para morirse. Pero eso si, CALDOSO
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