sábado, 24 de abril de 2010

HEMC #43: Pimientos rellenos de atascaburras



hemc #43 - nueces

"Atascaburras" es el nombre que recibe un plato de las serranías castellanomanchegas a base de bacalao, patatas, aceite y ajos que se acompaña de huevo duro y nueces. Es un plato muy antiguo y sencillo de elaborar, con un sabor delicioso y delicado y que ofrece muchas maneras de ser presentado, desde la clásica, en cazuelitas con mucho pan tostado para untar, o como relleno de unas tartaletas u hojaldres (para unos entrantes finolis usar manga pastelera con boquilla rizada), o esta que os propongo yo: como relleno de unos pimientos del piquillo.

Atascaburras
  • 400g de bacalao desalado
  • 300g de patatas
  • 2 dientes de ajo sin el germen interior
  • aceite de oliva
  • sal
  • 1 huevo duro
  • 100g de nueces
  • 8 pimientos del piquillo
Poner a cocer las patas con agua y sal. Cuando les falten 5 minutos añadir el bacalao (si es muy grueso añadirlo un poco antes).
Cocer y reservar en su agua de cocción.

Poner los dientes de ajo en un mortero y machacar hasta hacer puré.

Triturar las patatas junto con el bacalao en el accesorio picador de la batidora o Thermonix.
Añadir el ajo triturado y mezclar muy bien.
Añadir el aceite de oliva poco a poco batiéndolo bien para que emulsione y quede como una crema espesa.

La cantidad de aceite es al gusto, ya que depende de lo que queramos que predomine su sabor.
Si las patatas fueran muy harinosas y la mezcla quedara muy dura, añadir poco a poco agua de la cocción.

Debe quedar una crema espesa pero fluída para poder rellenar los pimientos sin que se "desparrame" el relleno pero a la vez queden jugosos.
Secar bien los pimientos. Rellenarlos con la crema.
Cortar las nueces en trozos no muy pequeños y "tapar" la boca de los pimientos rellenos con ellas.

Poner los pimientos sobre el pato de servir, rallar el huevo duro sobre éste, y decorar con un hilillo de aceite de oliva y alguna nuez entera.


Tomar tibios (si es necesario calentarlos ligeramente en el horno antes de emplatar) o a temperatura ambiente



Con esta receta salada, que es una combinación riquísima de nueces y bacalao, colaboro en el HEMC de este mes que trata sobre los futos secos.

sábado, 17 de abril de 2010

Cañamones tostados


Habemus cañamones!!! Por fín, a la tercera, va la vencida!!

Como ya os mostré en las "secas" o "tortas de cañamones" , éstos son las semillas del cáñamo, ahora llamado "cáñamo industrial" y que tradicionalmente se cultivaba por la calidad de sus fibras vegetales en la producción de cuerdas e hilados. Es una variedad de la familia de la marihuana pero sin efectos psicoactivos y para cultivarlos es necesaria una autorización de la autoridad pertinente debido a la semejanza de ambas plantas.

No es difícil encontrar estas semillas, ya que en cualquier pajarería se venden porque (ahora) son alimento de pájaros. El problema es que la calidad exigible a los cañamones para pájaros no es la misma que para las personas, y aunque hay marcas que especifican que son aptas para el consumo humano (como Kiki) dos de las tres que he comprado estaban húmedas o ligeramente rancias.

Pero como ya os he dicho, a la tercera va la vencida y he encontrado unos cañamones, que aunque pequeñitos (los hay más grandes) han resultado ideales para lo que yo los quería.

En mi pueblo y otros muchos, los cañamones siempre se han comido tostados con sal, son crujientes y saben parecidos a las pipas. Con ellos además se hacían tortas de cañamones, y "cagaíllas" (menudo nombrecito!! pronto sabreis lo que son...) Como otras muchas semillas, son altamente nutritivas, 100 gramos contienen un elevado porcentaje de proteínas (27 gramos), fibra (30 gramos), carbohidratos (6 gramos) y grasas ricas en omega 3, 6 y 9 (30 gramos).

Si os da yuyu comer semillas de pájaro podeis comprarlas en herbolarios. En Naturasí venden estas semillas de cáñamo ya peladas y aunque éstas no las he probado aún, he leído que también puede hacerse con ellas una horchata requetenutritiva. Los cañamones sin pelar se pueden añadir tostados como el resto de semillas (amapola, linaza, mijo, sésamo, pipas) a panes, galletas y cualquier receta a la que querais añadir un punto crujiente y nutritivo.

Para tostarlos, yo los tuve primero en remojo una noche, de esta manera se limpian de polvo, tierra y pajitas. Luego se escurren bien y se tuestan en una sartén antiadherente con un poco de sal (¡algunas semillas saltan como las palomitas!) hasta que se oscurezcan un poquito y huelan como a frutos secos tostados (pipas y/o nueces). El sabor también recuerda algo a las pipas y al tostarlos la cácara se rompe con facilidad cuando se mastican, con lo que así se aprovecha el germen del interior, que es donde se esconden los nutrientes (si comemos semillas y no se rompen sus cáscaras al masticarlas, éstan realizan el tránsito intestinal sin inmutarse, volviendo a la madre naturaleza intactas ;-)

Si os animais a probarlos, recordad:
  • Al abrir una bolsa de cañamones recién comprados éstos no deben de daros una "bofetada" de olor acre a semillas y campo; si el olor es muy intenso, posiblemente es que estén rancios o húmedos. El olor debe ser muy ligero, como cuando se abre una bolsa de pipas sin pelar o frutos secos. Los que yo compré son de la marca Pilesán y los 250 gramos me costaron 55 céntimos.
  • Los cañamones crudos no deben de ser demasiado verdes, sino marrones-ambarinos como éstos de mi mano. Si están verdes, descartadlos.
  • Al tostarlos se oscurecen ligeramente y están listos cuando desprendan olor a frutos secos (como cuando tostamos semillas de sésamo, amapola, etc)
  • Al tostarlos no deben de dejar un regusto amargo, si es así, es porque están rancios.

viernes, 9 de abril de 2010

Versionando: Minimuffins de plátano y chocolate


Lo bueno de los blogs de cocina es la cercanía con sus autores y autoras, el conocer recetas fantásticas que muchas veces no se encuentran en los libros y establecer amistades cibernéticas y culinarias. Para mi fueron todo un descubrimiento y desde entonces he incorporado muchas recetas de estos blogs a mi "fondo de armario de cocina".

Una de estas recetas es el Pan de Banana de "La Cocina de Lechuza" (pincha sobre las palabras para conocer la receta y el blog de Pilar, nuestra lechuza de internet). Al preparar la masa de este pan o cake vi que su textura era algo más densa que la de los bizcochos y como tenía unos moldes de silicona de minimuffins que quería estrenar me decidí a cambiarle la presentación a la receta.

Gracias a la entrada de Adi en sus blog "Pan y Varios" sobre muffins descubrí uno de los secretos para hornear estos primos americanos de las magdalenas y conseguir que tuvieran ese copete tan característico: la masa de muffins es densa, y en lugar de verterla sobre los moldes es necesario ponerla con ayuda de una cuchara. Si quereis conocer el resto de secretos para unas muffins perfectas, ya sabeis, pinchad sobre las palabras de diferente color de este texto.

¿Y a quien no le gusta una deliciosa muffin con pepitas de chocolate? A mi personalmente, me encantan, así que le añadí chocolate de tableta cortado a trocitos a la masa del pan de banana, la puse en los moldes "mini"(5 cm de diámetro) y en 15 minutos de horno salieron estas delicias.
El resultado, buenísimo: los sabores del plátano y chocolate combinan fenomenal, un bizcocho jugoso y tierno que se mantiene perfecto con el paso de los días.