Hay personas que intertextualizan, es decir, copian de mala manera texto y fotos de las recetas de otros. Yo hoy he descubierto que tengo mi propio/a intertextualizador gracias a un comentario anónimo.
Esta era mi receta de rosquillos y esta es la que ha publicado "La cocina de la Janda" con su particular manera de "rendir homenaje a nuestras madres y abuelas que nos fueron metiendo por el camino de la comida de verdad,la que ha echo de nuestra gastronomia un referente mundial."
Gracias a la persona que me ha avisado de ello. Gracias a los que seguís visitando este blog y agradeciendo mi trabajo con vuestros comentarios.
Y a "Cocina de la Janda" sólo decirle que por favor rectifique su entrada de los rosquillos y que me "devuelva" mi foto, mi receta y mi texto.
Un saludo, gentes de bien.
¡Noticias de última hora!
La entrada de los rosquillos intertextualizados ha desaparecido de "La cocina de la Janda" y entiendo que eso ha sido un gesto de buena voluntad por tanto ya no tengo más que decir, tan sólo dar las gracias. Un saludo.
miércoles, 29 de abril de 2009
miércoles, 22 de abril de 2009
Caldereta (sin lumbre)
Aunque ya publiqué una receta de caldereta de cordero aquí, que estaba cocinada con lumbre, ahora toca la versión "en la cocina de casa", es decir, con cocina de gas o vitrocerámica.
En este caso partimos de una receta con unos ingredientes tan básicos como:
-1 k de carne cortada en cubos (yo usé ternera magra para guisar aunque también puede ser cordero o cerdo)
-2 hojas de laurel
-4 granos de pimienta negra
-8 dientes de ajo sin pelar
-1 pimiento rojo seco (tipo ñora, del cristal o chorrón)
-Vino blanco
-Aceite de oliva virgen extra
-Sal
-Agua
La caldereta se cocina "en crudo", es decir, no se sofríen previamente los ingredientes, sino que se cuecen. Para que quede como carne con salsa y no hervida como en cocido, hay que ponerle la cantidad justa de agua y cocinar a fuego muy lento para que quede tierna, jugosa (cuanto más gelatinosa sea la carne, mejor) y "caramelizada" en su propio jugo de cocción.
Elegimos una cacerola amplia (preferiblemente antiadherente) donde quepa la carne en una sola capa o dos como máximo.
Ponemos la cantidad suficiente de aceite para que cubra la base de la cazuela (pero sin que la "balsa" llegue al medio centímetro de profundidad).
Introducimos dentro de ella la carne con el laurel, los granos de pimienta, el pimiento abierto y sin semillas y los dientes de ajos sin pelar (enteros, ligeramente aplastados o cortados transversamente por la mitad).
Añadimos sal al gusto y ponemos agua y vino suficientes para que la carne quede ligeramente cubierta. La proporción será 1 parte de vino por dos de agua y si se quiere un sabor más intenso y ácido, ponemos mitad y mitad de cada líquido.
Ponemos la cacerola a fuego fuerte y cuando comience a hervir, retiramos la espuma y bajamos el fuego completamente. Tapamos y cocemos al mínimo durante al menos 1 hora y media. Pasado este tiempo, comprobamos que la carne esté tierna y si es así, restregamos el pimiento rojo por las paredes de la cacerola para que de más color a la caldereta y seguimos cociendo destapada hasta que la salsa se espese y quede como en la foto:
Sacamos del fuego y servimos, "limpiando" bien la salsa de las paredes de la cacerola con una lengua de silicona.
Si vemos que el líquido se evapora demasiado rápido (hay mínimos en cocinas que realmente no lo son) y la salsa se ha trabado antes de que la carne esté tierna y gelatinosa, añadimos poco a poco agua y vino hirviendo.
Si por contra añadimos demasiado líquido, para cuando la salsa se haya trabado la carne se habrá quedado seca, por lo que es mejor quedarnos cortos e ir incorporando agua y vino poco a poco.
Como veis, es una receta muy sencilla. Además, os aseguro que el sabor es concentrado y potente, tan fantástico como todo lo que se cocina a fuego lento.
domingo, 12 de abril de 2009
HEMC 32: Hojaldre "Asturias 2.0" (de chosco con queso La Peral)
Esta es mi contribución al HEMC de este mes, dedicado al hojaldre.
Esta masa, además de deliciosa, "ennoblece" cualquier alimento por eso es ideal para darle un toque diferente y sofisticado a cualquier cosilla que tengamos por el frigo: jamón york y queso, espinacas a la crema, salchichas, etc. Si teneis invitados, no lo dudeis: "hojaldrad" cualquier cosa y triunfareis ;-)
En Semana Santa hemos pasado unos diíllas por tierras asturianas y hemos hecho este gran descubrimiento gastronómico que preparado en hojaldre queda realzado y más rico si cabe. Lo del nombrecito "Asturias 2.0" es simplemente porque lo he versioneado dándole un aspecto más de domingo con una salsa de queso también asturiano y con hojaldre (fresco del Lidl y bastante bueno, por cierto) en lugar de servirlo como se hace tradicionalmente con patatas hervidas.
La receta es súper fácil y súper rica (esto último comprobado con comensales que no dejaban de relamerse los bigotes y cantarle alabanzas) porque el sabor ahumado y adobado del chosco no necesita de muchos adornos para poder disfrutarlo.
Hojaldre de Chosco de Tineo y queso La Peral (4 personas)
-1 lámina de hojaldre de unos 275g (si es casero mucho mejor, pero si no, el del Lidl va fenomenal)
-1 yema de huevo (opcional)
-16 rodajas finitas de Chosco de Tineo ya cocido
-1/2 k de champiñones bien lavados
-Queso de La Peral u otro queso azul desmenuzado (1 cucharada sopera)
-1 brick de nata vegetal de 200ml (por eso de evitar el colesterol)
-Aceite de oliva
-Sal
Precalentar el horno a 220ºC (con función ventilador a 200 ó 210ºC) . Extender el hojaldre y cortarlo en ocho rectángulos iguales. Ponerlos en una placa sobre papel de horno o de aluminio y pincelarlos con la yema de huevo batida (opcional, esto no aporta sabor, sino brillo. Yo no la usé)
Hornear durante 10 ó 15 minutos (en mi horno, con la función ventilador en 10 ya estaban crujientes por fuera y con las capas internas hechas pero aún jugosas).
Sacar del horno y con cuidado poner los rectángulos en una rejilla para que se templen.
Filetear los champiñones y sofreírlos en dos cucharadas de aceite en una sartén amplia. Añadir algo de sal. Cuando los champis hayan evaporado toda su agua añadir el queso La Peral picadito (yo puse una cucharada sopera colmada para obtener un ligerísimo sabor a queso que no predominase sobre el resto de sabores) y la nata vegetal.
Remover y mezclar bien hasta que el queso se funda y la nata comience a hacer chup chup. Retirar del fuego inmediatamente y reservar caliente.
Abrir los hojaldres con cuidado de no romperlos. Repartir sobre la base de cada hojaldre la salsa de champis con queso. Poner encima dos lonchas de chosco y cubrir con la tapa de hojaldre.
Se pueden introducir los hojaldres ya rellenos unos instantes en el horno para que cojan calor o tomarlos así, tibios.
Acompañar con una ensalada verde y a pesar de su aspecto "simplón" está de-li-cio-sí-si-mo.
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